Los orígenes de esta singular celebración, la más importante de las fiestas gastronómicas que se realizan en el Ayuntamiento de A Laracha, las encontramos en décadas pasadas, cuando la producción de las cerezas tenía una gran importancia especialmente en la zona del valle del Anllóns. Aprovechando que llegaba la época en la que el fruto rojo comenzaba a estar maduro y listo para su consumo, los comerciantes vendían en la feria del primer domingo de julio gran cantidad de ese producto.
Hoy en día, a pesar de que la comercialización del codiciado fruto rojo perdió importancia y la producción en A Laracha es para autoconsumo, se mantiene la costumbre de celebrar la ya tradicional Feria de las Cerezas, con una muy notable afluencia de gente que, además de participar en la actividad comercial, también disfruta de las propuestas festivas, lúdicas, culturales y deportivas que se desarrollan durante toda la semana.
Se celebra en el Campo de la Feria de la localidad de Paiosaco (en la parroquia de Lestón) que es el segundo núcleo más poblado del Ayuntamiento de la Laracha.
El comercio, la gastronomía y los actos lúdico-festivos se combinan durante la primero fin de semana del mes de julio y los días previos a la celebración del evento.